Mujeres buscan empoderarse en las urnas

“Las chicas gobiernan, Trump babea”, así rezaba el letrero que colgaba del cuello de la pequeña de cinco años Arianna Hall, quien vestida como una princesa, pidió la palabra para expresar su razón para estar en la Marcha de Mujeres en Miami: “Estoy aquí para luchar por lo que Trump ha hecho. Trump, si estás leyendo esto, me siento realmente mal por ti porque las chicas mandan”.

Avilyn, su madre, a diferencia de Arianna, prefirió no hablar de política pero recalcó que busca ser ejemplo para sus hijas y enseñarles que las voces de las mujeres importan.

Al menos 2.500 personas acudieron al Centro de Convenciones Mana Wynwood para celebrar el primer aniversario de la gran marcha que se tomó las principales urbes del país en 2017, para enviar un mensaje de resistencia a las acciones de la administración de Trump, en el primer día de su gobierno.

En 2017 marcharon y en 2018 toman acción bajo el lema bandera “Power to the polls” de cara a las elecciones legislativas de noviembre próximo.

Según Emma Collum, presidenta de Women’s March Florida, su meta de conseguir poder en las urnas es alcanzable. “Queremos elegir más mujeres, más inmigrantes, más mujeres musulmanas, más LGBTQIA, más mujeres indígenas”.

La campaña se centrará en registrar nuevos votantes y movilizar a los que ya se han activado. De acuerdo con Pam Keith, candidata demócrata para el congreso por el distrito 18º de Florida, el principal objetivo es introducir los candidatos a la gente, incentivarlos a organizar sus comunidades, sus familias y sus vecindarios para salir y votar, “pero también alentarlos a que piensen en ellos mismos como líderes”.

La representación política no fue la única premisa que sostuvieron los asistentes, tal como ‘Julieta’, oriunda de la ciudad de sol, quién además quiso mostrar su descontento con las nuevas reformas tributarias y los ajustes migratorios. “No me gusta esta reforma de impuestos, creo que es para los ricos. También el DACA es un gran problema, me parece horrible si tú fuiste traído a este país a los 10 años, ahora puedas ser deportado”, expresó.

Una representación de una armónica convivencia de culturas, géneros y razas.

El controversial tema del derecho al aborto no faltó en las discusiones que se entablaron entre las féminas. Diana Alarcón, miembro del Instituto Nacional de Latinas para el Derecho Reproductivo, defendió el derecho a la autonomía sobre su cuerpo. “Peleamos por el derecho a que nada más tú decidas cuándo tener hijos, con quién los quieres tener y que nadie te quite la información”, finiquitó.

Y como evidencia del vaticinio de que el momento se convertiría en un movimiento, estas manifestaciones se replicaron durante todo el fin de semana en otras ciudades de Estados Unidos como Washington, Nueva York, Chicago, y Las Vegas.

Publicado en: South Florida News Service